Hace justo un año, a esta hora, se publicaba la
primera entrada de este blog. No era nada espectacular, pero los comienzos son eso, comienzos.
Este blog era casi un propósito de Año Nuevo, aunque no sabía muy bien cuales serían sus derroteros. La verdad es que a día de hoy tampoco lo tengo mucho mas claro. Si esta combinación de ceros y unos, tan mía, pudiera quejarse, imagino que lo haría en primer lugar de su crisis de identidad, y no lo culpo. Cada vez que alguien me pregunta: ¿Y de qué trata tu blog? Me muerdo el labio y me quedo pensando un rato; respondo alguna vaguedad, nada muy concreto, quizás algún chiste, pero no tengo una respuesta clara que ofrecer. De hecho alguna vez he pensado en sustituir la cabecera por algo tipo:
AVISO A NAVEGANTES: Si alguien llegó aquí pretendiendo aprender algo, si alguien busca conocimiento, calidad o que este lugar le aporte algo indispensable en su existencia, lo siento, pero sería recomendable que se volviera por donde vino. Este es el blog de una neurótica que habla de lo primero que le venga a la mente, sin más.
Por eso mismo, tengo que daros las gracias a todos, por haberme entendido o por intentarlo, por pasaros por aquí, por regalarme comentarios y palabras que muchas veces no merezco. Al comienzo de esta aventura, nunca pensé que a nadie le interesara lo que yo puedo escribir, no pensaba que me fuera a leer mucha gente, y a pesar de todo este apoyo, aún sigo publicando sin pensar que al otro lado de la pantalla, alguien pasea la vista por lo que yo torpemente intento dibujar con letras.
Es manido, y se repite hasta la saciedad, pero no deja de ser cierto que sin todos vosotros, sin los que me visitan y no comentan, sin los que dejan una muestra de su paso por aquí, sin los que no les gusta y lo dicen… nada tendría sentido, yo podría escribir claro, pero quedaría totalmente incompleto.
Ya comenté en el balance anterior, cuanto me alegro de haber creado este sitio, cuanto me ha permitido volar, a cuantas personas maravillosas me ha permitido conocer o con cuantas personas que ya conocía, me permite intercambiar opiniones, y es reiterativo, pero no dejo de pensar que aquella noche no estaba equivocada al lanzarme a la blogosfera.
También me gustaría pedir perdón a esa gente que aterriza en el tejado por buscadores y otros medios, y se encuentran con esto, que poco o nada tiene que ver con lo que buscaban, como toda esa gente que llega siguiendo la pista de información sobre Los juegos Olímpicos, sobre guías de Italia, sobre enfermedades nerviosas, me disculpo ante las fans de Anmi Lámar, a las que sólo puedo contarles que me dio mi nombre (nick), incluso pido perdón a esa persona que buscaba tiendas de comida para gatos en Roma, y a esa otra persona que puso en Google la pregunta de que si hacerse la cera en sus partes era malo, y es que uno le pregunta eso al buscador de buscadores, y aparece aquí, dónde yo no puedo arrojar luz a sus dudas…
Han sido 93 entradas, mas de 2.570 comentarios, alrededor de 38.000 visitas, que a mi se me antojan incalculables, y a cambio sólo puedo daros un puñado de papeles rotos, algunas fotos extrañas, versos robados, anhelos de viajes y pensamientos que se me deslizan entre las manos… pero si yo sigo, y estáis ahí, espero que sean muchísimos más, y que pase otro año más sin darme cuenta.